jueves, 21 de mayo de 2009

Recuerdos de mierda.


Recuerdos que te hacen llorar...

Rosas secas, libros llenos de polvo, fotografías, canciones, nombres, palabras.

~¿Por qué tuvo que ser así? ¿Por qué tuve que perder tanto?
No fue mi culpa, ¿o sí? Admito que mantengo las distancias, y que hice mía una batalla que no me correspondía.
Pero, tenía que elegir. ¿Puedes enteder eso? Tuve que elegir, y tú, bueno, tres años de ausencia evidencian lo que pasó contigo. A veces te extraño. Tus caricias, tus abrazos, tus palabras cariñosas... Y siento que fuí tonta y egoísta por no haber sabido retribuir correctamente tu amor. Era una niña. Y, sin embargo, admití mi error hace mucho. Tú en cambio, me ganabas en sabiduría, pero ¿dónde estás? ¿dónde estabas?
Silencio.
Temas que no se pueden tocar porque resultan simplemente demasiado dolorosos.
Te recuerdo. No hay noche sin llamadas mudas, esperando de alguna forma encontrarte para transmitirte todo lo que necesito decir. Te amo. A pesar de todo, te amo. Te extraño. Daría cualquier cosa por volver todo a como solía ser... pero supongo que ahora no es el momento.
Tengo hace algún tiempo la triste certeza de que la próxima vez que nos veamos será bajo otras circunstancias, y será la última. Desearía que no fuera así. Desearía poder ser más fuerte y vencer los obstáculos, pero, ya ves, aquí estoy, conteniendo el llanto.

Los extraño tanto a todos ustedes... a pesar de que ahora mismo las cosas no han cambiado todo lo que pueden llegar a cambiar. Cumpliré mis promesas, lo prometo xD

Miro al rededor, y sigues estando presente. Pedacitos de tí repartidos por mi habitación, testigos mudos de lo que fuímos. Lo lamento, lo sabes.
Pero ya es tiempo de dejarte ir, ¿cierto?
Supongo que así es como debe ser... karma, le llaman.
Me quebraste. Me quebraste y me ha costado un mundo volver a armarme.
Por eso a veces te odio.
Y lo que más odio es que nunca te olvidaré, (por más que quiera) y es que me marcaste como nadie, aunque me guste negarlo.
Me parece que todo resultó de acuerdo al plan, no sé a cuál, pero a alguno. Y eso está bien, creo.
Hay un montón de cosas que nunca dije, por orgullo o por estupidez, tú elige.
Te quise como a nadie, a pesar de toda la mierda que me hiciste tragar.
Y sigo queriéndote...
Pero, ya es tiempo de dejarte ir.
¿Cierto?






No hay comentarios:

Publicar un comentario